Domingo de la Torre fue un Asesino de la Hermandad española durante la Inquisición española.
Nacido durante el Renacimiento, Domingo de la Torre fue General de los Mercenarios en Saragoza, con una carrera de cuatro décadas de experiencia liderando soldados en batalla, antes de convertirse en Maestro de Armas para los Asesinos.
Biografía[]
Siendo un hombre calmado y resuelto, Domingo comenzó su carrera a temprana edad como conscripto del ejército español y ascendió de rango a una velocidad sin precedentes. Era un líder natural, carismático y combatiente sin par, abandonó el ejército para formar su propio grupo mercenario llamado Los Hijos del León y ganar una fortuna. Su reputación se extendió durante dos décadas, sirviendo como guardaespaldas a los nobles españoles y participando en innumerables batallas.
A pesar de sus incomparables habilidades tácticas y de combate, la máquina de guerra reclamó a muchos de los compañeros de Domingo, dejándolo solo y abatido. Después de veinticinco años de derramamiento de sangre, disolvió a los Hijos del León y se arrepintió de que las medallas y el oro no pudieran curar sus pérdidas.
La culpa de Domingo lo puso en peregrinación, durante la cual se encontró con un grupo de Asesinos. Durante una larga noche de conversación, se enteró de las enseñanzas de la Hermandad y vio una verdadera oportunidad para su propia redención. Domingo abrazó el Credo, creyendo que esta sería su última oportunidad de luchar por algo virtuoso en lugar de los intereses de los nobles belicistas, y dedicó sus días restantes a la Hermandad.
Entradas en la base de datos[]
Assassin's Creed: Rebellion[]
| Viejo general sabio
Domingo de la Torre fue un general y mercenario de Zaragoza que contaba con cuarenta años de carrera a sus espaldas liderando soldados en combate, antes de convertirse en maestro de armas de la Hermandad de los Asesinos española.
Calmado y resuelto, Domingo comenzó su carrera a muy corta edad, reclutado por el ejército español, y ascendió entre sus filas a una velocidad sin precedentes. Era un líder carismático nato que no tenía rival en el combate, y dejó el ejército para fundar su propio grupo de mercenarios (llamado Hijos del león) y ganarse la vida combatiendo a sueldo. Fueron labrándose una reputación a lo largo de más de veinte años, sirviendo como guardaespaldas de nobles españoles y participando en innumerables batallas.
A pesar de su táctica sin rival y su destreza en combate, la maquinaria bélica fue devorando a muchos de sus compañeros, dejando a Domingo cada vez más solo y desalentado. Tras veinticinco años de derramamiento de sangre, desmanteló a los Hijos del león, lleno de remordimientos que el oro y las medallas no podían aplacar.
Este dolor le hizo embarcarse en un peregrinaje, durante el cual conoció a un grupo de Asesinos. Una larga noche de conversaciones le sirvió para conocer las enseñanzas de la Hermandad, y vio en ellas la oportunidad de redimirse. Abrazó el Credo creyendo que sería su última oportunidad de luchar por algo virtuoso más allá del interés bélico de los nobles, y dedicó sus últimos días a la Hermandad. |
Curiosidades[]
- Domingo se basa en Dominick Meissner, el director creativo de Assassin's Creed: Rebellion.
Apariciones[]
- Assassin's Creed: Rebellion (primera aparición)
Galería[]
