La Batalla del Nilo fue una escaramuza que involucró a las fuerzas romano-egipcias de Julio César y su reciente amante Cleopatra contra las fuerzas ptolemaicas de su hermano, respaldadas por la Orden de los Antiguos.
Preludio[]
Después de perseguir a su rival Pompeyo a Egipto, César, se entrelazó en la Guerra Civil Alejandrina después de que su rival fuera asesinado por Ptolomeo XIII en un intento de complacer a César. Cuando la cabeza decapitada de Pompeyo fue presentada a César, él estaba muy impresionado.
Después de que Cleopatra se presentara a César, él comenzó a inclinarse en su favor después de ser golpeado por su belleza. César ayudó a Cleopatra durante el Sitio de Alejandría.
Batalla[]
Las legiones romanas destruyeron un fuerte ptolemaico, y después de intensos combates asaltaron el campamento de Ptolomeo. Miles de personas huyeron, incluido Ptolomeo, que se ahogó cuando su barco fue atacado por cocodrilos y volcó. Aunque Aya tuvo la tarea de matar a Ptolomeo, vio que estaba tratando de huir y lo dejó. Bayek persiguió al eunuco Potino y lo mató a él y a su elefante de guerra. Después de que César le informara a Bayek sobre el paradero de Lucius Septimius, Bayek fue a buscarlo.
Bayek derrotó a Septimius, pero se le prohibió matarlo por César, quien afirmó que, debido a que Septimius era romano, sería sometido bajo la ley romana. Los soldados romanos tuvieron que restringir físicamente a Bayek para que no atacara más a Septimius. Egipto ahora estaba en manos de César, que colocó a Cleopatra en el trono.
Consecuencias[]
Después de que derrotó al ejército de Ptolomeo e instaló a Cleopatra como gobernante, engendró a su único hijo biológico conocido con ella, Ptolemeo XV César, más conocido como "Cesarión". Septimius se libró de la ejecución, mientras que Bayek y Aya fueron retirados de los servicios de Cleopatra poco después de su coronación.
Aparición[]